Utilizamos técnicas avanzadas para criar caracoles de calidad. Esto nos convierte en el socio ideal para clientes que valoran la sostenibilidad y el bienestar animal.
															
															Nuestro núcleo de producción se centra en helicicultura bajo control climático y alimentario. Los caracoles se crían en entornos adaptados, sin forzar ciclos naturales.
Su destino es el consumo humano gourmet, garantizando un alto estándar de frescura y calidad. Seguimos modelos sostenibles avalados por expertos del sector.
															Realizamos cultivos de forraje, hortalizas y vegetales complementarios a la cría de animales. Este modelo integrado permite un equilibrio nutricional del terreno y reduce el desperdicio.
La diversidad de producción mejora la salud del ecosistema y amplía nuestras posibilidades de oferta.
															Cría de ganado en condiciones de bienestar animal, con seguimiento veterinario y alimentación natural.
Controlamos todo el ciclo: desde la reproducción hasta la comercialización. Este proceso nos permite garantizar carne de calidad, cuidando tanto el entorno como la trazabilidad del producto final.